lunes, 23 de junio de 2014
Interbalnearia parte III
El segundo amanecer del viaje, también en carpa, no fue como
el primero. La poderosa cercanía del mar cambiaba las circunstancias. Las diferencias que más sentí fueron la leve tensión muscular debido al frío y
la distensión pulmonar debido a lo mismo. El aire frío del mar cargado de pureza
me ensanchaba los bronquiolos. Tenía por delante un tercer día consecutivo de
ruta sin tener aún decidido dónde pasar la noche. Joya.
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